Hay veces que con el refranero algunos se hacen un lío y lo interpretan a su modo y manera por no haber entendido bien el mensaje o por confusión de fechas, como suele ser el caso de este viejo consejo que nos invita a preservar nuestra salud hasta una jornada concreta, conservando sobre el cuerpo las prendas de abrigo y evitando así un molesto costipado...
Dice la sabiduría popular que "hasta el cuarenta de mayo, no te quites el sayo" y efectivamente parece que la experiencia nos enseña que, en la mayoría de las ocasiones, es bueno no desabrigarse demasiado hasta que Junio, con la próxima entrada del estío, nos brinda las temperaturas adecuadas para que nuestro cuerpo no sufra las consecuencias si prescindimos muy pronto de chaquetas, cazadoras y otras prendas similares.
Claro que eso del cuarenta de mayo, si uno se atiene a lo escuchado en distintos medios radiofónicos, parece que a ciertos periodistas les plantea la duda sobre el día concreto en cuestión, dando por bueno que el 10 de junio es el que marca dicha frontera, cuando en realidad si a los treinta y un días de mayo, le sumamos nueve, precisamente esa será la fecha - el día de hoy, nueve de Junio - contemplada en al antiguo refrán...
Así es que, a pesar de que la jornada se ha presentado desapacible, lluviosa y ventosa, practicamente en toda España - en algún lugar, con riesgo incluso de nevada - y desde luego en nuestra tierra, lo cierto es que hoy llegamos al tan aludido cuarenta de mayo, aunque por la que ha caído quien esto escribe espera que, usted amigo lector, haya observado una prudente actitud y todavía esté usando una rebequita, pues si no, no le arriendo las ganancias del seguro costipado.
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