Posiblemente la opinión del Ayuntamiento de Vejer no coincidirá con la nuestra, pues evidentemente en los últimos años en dicha zona de la costa de la provincia de Cádiz se han llevado a cabo actuaciones que pretendían mejorarla y dotarla de servicios, en beneficio de las ciudadanos que al lugar acuden, durante el verano, pretendiendo pasar un buen día...
Y así, se han acometido intervenciones para proteger las dunas que separan la playa de la carretera, se han asfaltado los antiguos caminos polvorientos, se han colocado papeleras y, de algún modo, se ha pretendido ordenar y organizar lo que hace tan solo apenas cinco o seis años era lo más parecido a un poblado del Oeste.
Claro que a pesar de estas buenas intenciones, en la actualidad El Palmar, la hermosa playa entre Vejer y Conil, es un auténtico caos en cuanto al estacionamiento de vehículos se refiere, ya que se han suprimido muchos espacios que antes se utilizaban para tal fín sin crear, paralelamente, algunas bolsas de aparcamiento que permitan colocar los coches de manera más o menos ordenada y racional.
Por otra parte, la misma playa se ha convertido - en algunas de sus zonas - en lugar de botellona, ruidosa y sucia, en el que cada cual hace lo que le viene en gana, incluso practicar el nudismo, sin reparar que en el extremo sur - en dirección a Conil - ya existe desde hace años espacio habilitado para ello, donde quienes van ya saben lo que encontrarán sin tener que soportar la imprevista presencia de bañistas como sus respectivas madres les trajeron al mundo, olvidando que junto a ellos se encuentran niños, personas mayores o simplemente ciudadanos que tambien merecen ser respetados...
Además, en el colmo del despropósito, a pesar de los carteles, en El Palmar pueden verse perros correteando entre los bañistas, partidos de fútbol improvisados cuyos jugadores sortean a quienes están tumbados en la arena o pasan junto a ellos, todo lo cual no es si no una clara muestra de la falta de vigilancia en que se encuentra este lugar - repito, hermoso como pocos - de nuestra costa gaditana.
Y ante esta situación cabe preguntarse si ¿hace algo el Ayuntamiento de Vejer?
Pués ya va siendo hora de que tome cartas en el asunto antes de que su playa se convierta en una jungla a la apetezca poco acudir, como de hecho ya ocurre especialmente los fines de semana...
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