Es habitual que, ante una despedida y llegada de año, se formulen toda clase de buenos deseos, se manifiesten las más íntimas y anheladas expectativas para uno mismo y, desde luego, para los demás, con la ilusión de que las previsiones más optimistas se cumplan y que el tiempo nuevo que llega sea propicio para todos.
Pués esa y no otra es la intención de este post, a las mismas puertas de 2008, año bisiesto por cierto, para que sus 366 días traigan todo aquello que signifique paz, justicia y progreso para España, para Andalucía, en particular, y para todos nosotros además salud, trabajo y algo de bienestar, aunque sea el mismo que hayamos podido disfrutar en el año que ahora concluye, exactamente en algo menos de seis horas.
Y en ese ramillete de buenos deseos, no estará de más anhelar el final del terrorismo, de una vez por todas, el diálogo entre las fuerzas políticas, especialmente en todas las cuestiones de Estado, la tolerancia entre quienes opinan y piensan de distinta manera, el contínuo perfeccionamiento de la democracia, la alternancia entre las fuerzas políticas, a todos los niveles, para que no se instale una perniciosa permanencia en el poder, el trabajo como bien extensivo para todos, el respeto hacia quienes comparten con nosotros el pequeño universo de nuestra ciudad...
En definitiva, que se haga posible en 2008 algunas de esas cosas que parece hemos olvidado o, se han instalado indebidamente en nuestra sociedad a la que denominamos plural pero que lo es bastante menos de lo que la propia palabra trata de definir.
¡ Ojalá que así sea...!
Feliz Año Nuevo para todos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario