La verdad es que, de un tiempo a esta parte, pocos motivos de satisfacción tenemos los habitantes de Jerez para congratularnos, para enorgullecernos de nuestra ciudad que a sus problemas económicos, impagos del Ayuntamiento a sus trabajadores, proyectos que se quedan en eso y una larga relación de frustraciones similares o peores, ahora por si poco fuera todo ello, se nos coloca, en un estudio realizado por la OCU, entre las ciudades más sucias de España, en lo que compartimos méritos con Sevilla, Jaén, Huelva y Málaga, vamos, media Andalucía...
Y es que en un reciente estudio sobre Gestión de Resíduos y Limpieza viaria que ha llevado a cabo la Organización de Consumidores y Usuarios de nuestro país, basado en la opinión de cerca de siete mil ciudadanos y en la información facilitada por los propios Ayuntamientos, nuestra ciudad queda relegada a una de las últimas posiciones, con una puntuación sonrojante en la valoración de sus propios habitantes.
Y esto, después de que hace ya desde luego bastantes años, Jerez fuera estimada precisamente por todo lo contrario, es decir, como una ciudad que podía presumir de limpìa, produce ciertamente pena y frustración en quienes queremos lo mejor para nuestro pueblo.
Claro que en este problema, aparte los derivados de la falta de pago a la empresa concesionaria del servicio de limpieza pública o a las deficiencias que el trabajo de la misma pudiera ofrecer, influye sin duda una megalómana planificación urbanística de la ciudad que la ha llevado a una extensión superficial no acorde con sus habitantes y, consiguientemente, a la exigencia de unos servicios tan gravosos que ahora no se pueden atender por falta de recursos económicos...
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