sábado, diciembre 22, 2012

Zambombas.

Así se llama, en Jerez, la celebración comunitaria de la Navidad que tiene un origen muy antiguo, que casi estaba desaparecida en la década de los sesenta, del pasado siglo; hasta que Radio Popular impulsara su recuperación que luego se materializó con las grabaciones en cassettes y discos microsurcos patrocinados por la Caja de Ahorros jerezana; que propiciaba la convivencia de los moradores en las Casas de vecinos y que ahora, como ocurriera años atrás con las sevillanas se ha puesto de moda hasta hacerse en demasiadas ocasiones recurrente, tratar de exportarse a tierras foráneas, lo cual es poco menos que imposible y a la que en ciudades incluso cercanas como Sevilla se le suele colocar la tilde sobre la última letra de la palabra para confundir una costumbre ancestral de nuestro pueblo con lo que los modernos podrían denominar como "una tocada"...

Pero la Zambomba de Jerez, la auténtica, es esa reunión de amigos, de familiares, que si empezó en los patios de las ya referidas Casas de vecinos se ha extendido por toda la geografía de la ciudad, se ha convertido - y en estos momentos de aguda crisis mucho mas - en ocasión para la solidaridad y a la que se han sumado hermandades, peñas de todas clases, restaurantes, bares, asociaciones y entidades varias que desde mediados del mes de noviembre se ponen a cantar a pleno pulmón esas letrillas populares de nuestros villancicos, los romances picarones que relatan historas un tanto subidas de tono pero llenos de ingenuidad para que suene la auténtica banda sonora de estas entrañables fiestas, ciertamente popular como pocas.

Por eso, junto a los "nacimientos", que en la ciudad han alcanzado categoría de auténticas obras de arte menor y que si son trasladables a otras latitudes, la peculiar repostería de esta época navideña y desde luego la gastronomía, el vino, y la interpretación flamenca de la Navidad o el Museo del Belén, bueno sería que por parte de los encargados de la promoción turística de la ciudad se creara una oferta diferenciada, un paquete - como ahora se dice - especializado en esta fiesta que  en Jerez alcanza una extraordinaria singularidad y que es capaz por si misma de atraer a muchos visitantes en los días que media entre la Nochebuena y la Epifanía...

¡Vayamos a ello con decisión!


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