Este Ministro Principal de Gibraltar es para nota y bien que harían los británicos en recortarle - ahora que está tan de moda el término y la acción - las alas, antes de que los acabe metiendo en un buen lío mayor del que ya ha creado con el lanzamiento de bloques de hormigon en las aguas en las que, desde siempre, han faenado nuestros pescadores de la zona y que el Gobierno de la Roca considera que son suyas y en ellas puede hacer, mas o menos, lo que le venga en gana...
Pero erre que erre, el tal señor Picardo, no ha tenido por menos que amenazar claramente a la Guardia Civil - al menos eso es lo que cuentan los Medios de Comunicación - con que si se acercan con sus patrulleras a las cercanías de Gibraltar, pueden ser tiroteados ya que podrían ser confundidos con terroristas y consiguientemente rechazados por la fuerza, dando una muestra mas de su auténtica falta de sentido común, de su escasa preparación para desempeñar semejante tarea de gobierno.
Pero así están las cosas con este personaje y así se tolera aquí una grave amenza como la que acaba de pronunciar, contra las Patrulleras de la Guardia Civil, el señor Ministro Principal gibraltareño, sin que nadie diga ni mu o a lo sumo nuestros diplomáticos hagan una de sus habituales declaraciones formales para referirse al asunto que por supuesto debería ser expuesto, con todo lujo de detalles y pruebas ante los organismos competentes de la Unión Europea, ante las Naciones Unidas y ante el Tribunal de los Derechos Humanos que, digo yo, a lo mejor tiene algo que decir, amén de pronunciarse sobre la Doctrina Parot que ha puesto en la calle a terroristas, asesinos y violadores, sobre la clara amenza de semejante sujeto...
Claro que a lo peor dicha improcedente manifestación es solo tomada como una bravata.
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