Ahora resulta, según un estudio realizado por las Universidades de Castilla-La Mancha y Cantabria, que tenemos en España la segunda red de trenes AVE del mundo, muy por delante de paises como Alemania, Italia y Francia y aproximándose rápidamente a la existente en Japón y sin embargo nuestro flamante medio de transporte es el penúltimo en la utilización por parte de pasajeros, lo cual habla claramente de obra faraónica que ha sido posible en una gran medida al dinero que nos ha llegado de Europa pero que nos pone en el foco del habitual despilfarro del que tanto se nos acusa en el viejo Continente y al que nuestra clase política, especialmente la defensora del Estado del bienestar, ha contribuído tan entusiásticamente, en los últimos años...
Y uno que es usuario de tan cómodo, rápido y eficaz medio de transporte y que ha vivido en primera línea su benéfica influencia en ciudades como Sevilla, a la que además de conectar con agilidad al resto de España ha puesto de moda, contribuyendo al notable incremento del turismo, igual que ahora está ocurriendo con Valencia o Zaragoza, por ejemplo, no puede por menos que mostrar su preocupación por estos datos que, afortunadamente, gracias a una acertada política de precios reducidos, de descuentos, etc. está cambiando de un tiempo a esta parte pero que de seguir la tendencia al incremento de líneas y frecuencias y la limitada utilización de las mismas por parte de los usuarios pueden llevarnos, como en tantas ocasiones ha ocurrido en nuestro país con otras experiencias, a una peligrosa situación de falta de rentabilidad que ponga en riesgo la red.
Por eso bueno sería tomar en consideración los datos alaborados por dos equipos de universitarios, analizarlos en profundidad y adoptar las medidas correctoras necesarias para que la red del AVE no solo no corra peligro sino que siga creciendo en el futuro además de en extensión en una utilización masiva por parte de los españoles y de cuantos vienen de visita a nuestro país, muchos de ellos bastante mas receptivos en apreciar la ventajas de los trenes de Alta Velocidad que nosotros mismos...
Y un buen principio de ese estudio sería, sin duda, mejorar la actual política de precios de los billetes para hacerlos mas asequibles al gran público pues ya se sabe que mejor es la caja llena que los vagones vacíos, algo así como lo que está ocurriendo en los campos de fútbol de toda España.
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