miércoles, octubre 13, 2010

Palmas y pitos...

En alguna de sus crónicas, ciertos críticos taurinos, suelen emplear esa expresión para definir el resultado global de la faena de un torero y ciertamente que con tan solo decir palmas y pitos están ilustrando a la perfección a quienes se interesan por el balance artístico del festejo...

Y eso, palmas y pitos es lo que, otro año más, ha deparado el balance general de la presencia de algunas autoridades y algunos políticos en el desfile de las Fuerzas Armadas con el que se ha conmemorado la fiesta nacional española, coincidiendo con la festividad del Pilar, jornada en la que en nuestro país celebramos el Día de la Hispanidad que, durante algunos años, adquirió la pomposa denominación del "Día de la Raza".

Palmas para el Jefe del Estado. Pitos para el Presidente de su Gobierno, abucheado insistentemente por parte de muchos espectadores de la parada militar que incurrieron, desde luego, en una clara falta de respeto al alterar con su griterío momentos solemnes como la ofrenda a los militares muertos en acto de servicio, aunque no fuera esa su intención y si la de manifestar su rechazo al Jefe del Ejecutivo.

Ahora, como siempre, unos a favor de dicha bronca y otros - especialmente miembros del Gobierno y militantes del Partido Socialista - en contra, lo cual aparte ser normal no minimiza en absoluto la censura a una acción de gobierno que a muchos no gusta en absoluto...lo cual no excusa la inoportunidad de la protesta por el acto que tenía lugar.

Claro que como mucho de los mismos que ahora muestran su repulsa a la bronca montada a Zapatero son los mismos que defienden, en no pocas ocasiones y siempre que a ellos no les afecte, el sagrado derecho de la libertad de expresión ¿como le ponemos el cascabel al gato...?

No hay comentarios: