Se supone que las autovías se acometen para agilizar el tráfico en las zonas donde se construyen y en el caso de las que circunvalan alguna gran ciudad, como es el caso de la denominada SE-40, en el entorno de Sevilla, dada la saturación de la ya antigua SE-30, resultado de las obras de infraestructura de las que, con motivo de la Expo 92, se benefició sin duda la capital de Andalucía, cuyas obras siguen demorándose y ya se anuncia la finalización de alguno de los tramos para el año 2013, es decir, un plazo excesivamente largo por delante...
Todo se debe, desde luego, al apreciable recorte del dinero destinado a este tipo de obras, como consecuencia de la crísis económica que afecta al mundo y singularmente a España, cuyo retraso en la recuperación de sus cuentas públicas con respecto a la de los paises de la Unión Europea es evidente, pero aún así no deja de ser preocupante que infraestructuras como la que nos ocupa acumulen semejante demora que, a la postre sufren todos los ciudadanos.
Pero eso es lo que hay y si por nuestra provincia siguen adelante las obras para que el AVE llegue finalmente hasta Cádiz y se concluye el segundo puente hasta la "Tacita de plata", que supondrá una importantísima mejora en los accesos a dicha capital, por estos lares podremos darnos por satisfechos aunque los sevillanos, como pasó en el caso del Metro, la autovía de la Plata o, sin ir más lejos, sigue ocurriendo con el Pantano de Melonares, lleno de agua que no llega a la capital por falta de las conducciones necesarias para el transporte del líquido elemento, deban ¿pacientemente? que seguir esperando, ni se sabe cuanto...
Y es que por lo visto, con nuestras cosas, con las de Andalucía, tristemente se cumple siempre aquello de que "las cosas de Palacio, van despacio...?
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