Jerez celebra su festividad patronal cada 9 de octubre, día de San Dionisio Areopagita, y tradicionalmente la conmemoración pública de esta solemnidad se ha centrado en una procesión cívica con el Pendón de la ciudad, trasladado desde el Cabildo Municipal a la Iglesia que tiene por titular a dicho Santo y, actualmente desde que esta última tuvo que cerrar sus puertas por graves problemas de su estructura, a la Catedral, antigua Colegiata...
Hubo un momento, en la década de los setenta del pasado siglo, que este traslado quedó absolutamente deslucido por falta de respaldo popular y por feliz iniciativa de ambos Cabildos y con la intervención de la Real Academia de San Dionisio, se acometió una profunda reforma, incluida la confección de una réplica del referido Pendón - popularmente llamado "el rabo de gallo" - cuyo deterioro amenazaba con su pérdida y la celebración de la festividad de nuestro Patrón jerezano tomó nuevo impulso, amparada por las entonces llamadas Fiestas de Otoño, que vinieron a sustituir a la antigua Feria de la Vendimia.
Han ido pasando años, las mencionadas fiestas se han transformado otra vez, hasta no quedar ni rastro de las mismas y los cambios de horario de la ceremonia Cívica - un solemne Te Deum en la Catedral, en hora excesivamente temprana para una jornada festiva, al que asiste corporativamente el Ayuntamiento y la Real Academia de San Dionisio -, la ausencia de los honores militares que antes se rendían a esta enseña, con rango simbólico y protocolario de Capitán General y la generalizada indiferencia sobre un acontecimiento que forma parte del acervo histórico de Jerez, han vuelto a colocar la conmemoración del Día del Patrón en estado auténticamente comatoso... del que urge salir cuanto antes, salvo que se le quiera poner fín a la misma de una vez por todas.
Y como quién esto escribe es de los que piensan que una ciudad, que se precie, no puede dar la espalda a su historia, a su cultura y a su patrimonio, no tiene más remedio que reclamar desde este post un compromiso real y efectivo de nuestro Ayuntamiento y de los distintos colectivos jerezanos para que el Dia de San Dionisio vuelva a recuperar una dignidad y un esplendor que nunca debió perder.
Que todo no consiste en crear y entregar distinciones más o menos acertadas, oportunas y justas. Los pueblos con historia deben cultivarla y potenciarla en beneficio de la estima y consideración propia y la de los demás...
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