Que una ciudad otorgue, por acuerdo de su Corporación Municipal, el Título de Hijo Predilecto a uno de sus habitantes nacido en ella, es que duda cabe el mayor honor que una persona puede recibir ya que dicho galardón, cuya concesión se contempla en el Reglamento de Honores y Distinciones de los Ayuntamientos, es la mas alta distinción, el mayor elogio público que alguien puede recibir por lo que representa de reconocimiento a toda una trayectoria vital del ciudadano al que se le concede por parte del gobierno local, elegido por mayoría de sus conciudadanos...
Eso es lo que esta misma mañana ha sucedido en Jerez, en el hermoso e histórico marco de los Claustros de Santo Domingo, lugar en el que se ha celebrado el Pleno extraordinario y solemne durante el cual y previa aprobación de la Corporación se ha distinguido con el Título de Hijo Predilecto de nuestra ciudad al empresario hostelero Faustino Rodríguez Marín, al que solo habría que llamar por su nombre de Pila para que todo el mundo - los de aquí y muchísimos de fuera - supieran de quién se trata y no por que en su persona se acumulen méritos académicos, económicos o empresariales sino por la sencilla razón de su bonohomía, su sencillez, su simpatía, su comprobada generosidad y sobre todo su constancia y entrega, desde niño, al trabajo tras la barra de un bar cuyo nombre heredado de su Padre ha traspasado las fronteras de Jerez para proyectarse a toda España, cuando menos.
Faustino, mi amigo, que se ha identificado tanto con su Padre que ya casi todos le llaman no precisamente por su propio nombre sino como Juanito, por el Tabanco que su progenitor abriera en la Plaza de la Yerba, al que el ha dado continuidad y que ha sabido convertir, pasados los años y tras interminables horas de dedicación, de trabajo en suma, en toda una referencia de la hostelería tanto en Jerez como en el resto de España y por supuesto en soporte empresarial y vital de su familia, merecía además este Título que su pueblo le acaba de conceder por haber llevado su nombre como bandera a todas partes y por ejercer como Anfitrión Plenipotenciario aquí mismo dando la bienvenida a sonrisa plena a cuantos se han acercado hasta la sede de la Embajada jerezana que tiene abierta en la Pescadería vieja...
Lo habitual es que este tipo de distinciones recaigan en personalidades de la política, la empresa, la comunicación, la medicina o la abogacía y eso está bien pero por no ser lo frecuente, también está muy bien que aunque sea de tarde en tarde las Corporaciones Municipales se acuerden de que hay gente humilde, todo corazón, que se entregan hasta la extenuación a su trabajo y precisamente por eso, simplemente por eso, se hacen mas que acreedores al reconocimiento de la ciudad que les viera nacer.
Eso es lo que nos motiva a darle la enhorabuena al galardonado, no solo por la amistad que nos une sino por un deber de justicia y desde luego al Ayuntamiento de Jerez. Ambos lo merecen sobradamente...
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