Si ese es el único discurso...

Que la oposición, en cualquier país del mundo, consiste en mostrar las carencias de quienes gobiernan, para hacer valer ante los ciudadanos las bondades de una determinada formación política y buscar así que en próxima consulta electoral se le vote mayoritariamente, es algo que por sabido tampoco merece mayor comentario, lo mismo que igualmente carece de interés reseñar que la función de quienes detentan el poder es, además de "vender" sus logros y aciertos, la de denunciar errores pasados y falta de capacidad de aquellos que aspiran a sustituirlos al frente de los destinos de un país, una región o una ciudad...

Claro que de eso - que entra de lleno en el terreno de lo normal - a lo que aquí estamos soportando y hace ya demasiados años, es algo que altera los nervios, crispa con razón al ciudadano y además de inútil en sí mismo, contribuye a crear una sensación de hastío que cada vez hace mayor el desencanto de los gobernados sobre quienes les gobiernan - o eso dicen ellos -, su alejamiento de todo cuanto "huela" a política y su apatía ante una necesaria participación en los asuntos que a todos nos afectan.

Por eso, si ese es el único discurso que ustedes saben pronunciar - y me dirijo a aquellos que han accedido mediante los votos al poder y a aquellos otros que se han quedado en la oposición, tanto en España como en Andalucía - callénse de una vez, por favor, y vayan con su música a otra parte, que esta que mal interpretan ni nos gusta ni  interesa a nadie, solo a sus escasos militantes de cuota, pues ya está bien de "tirarse los tratos a la cabeza", decir que lo tuyo es peor que lo mío, insultar y después recurrir al consabido recurso de "se me calentó la boca" y usted perdone y perder el tiempo, miserablemente, en lugar de tratar de aportar siquiera una idea positiva - una sola - para que los problemas - los que verdad afectan y preocupan al ciudadano - puedan encontrar vías de solución...

Ya digo, si solo ese es el discurso que ustedes saben pronunciar, ¡vayánse de una vez por todas a freir espárragos...!