El penúltimo día del mes de Agosto, en el magnífico recinto del Patio de Armas del Alcázar de Jerez, donde se han venido llevando a cabo los distintos espectáculos programados para el verano que va ya de retirada así como los llamados "Viernes Flamencos", tuvo lugar la actuación de la Big Band de Jerez, una formación musical que ya había dejado constancia de su calidad el pasado mes de junio y que ahora ha vuelto a demostrar, ante un público muy numeroso y participativo, su indiscutible categoría, cosechando nuevamente un sonado - nunca mejor dicho - triunfo...
Puede sin duda ufanarse Jerez de contar con esta formación, integrada por alrededor de una veintena de músicos profesionales, que bien merecería el respaldo de los responsables públicos y por supuesto de los jerezanos para que la iniciativa no se quede, como tantas otras en nuestra ciudad, en una hermosa tentativa que finalmente no se concreta en nada, pues si esta Big Band hubiera nacido en otro lugar seguro que desde el primer momento habría sido apoyada y respaldada por los suyos.
Y no es que en el caso que nos ocupa el público no haya respondido a las convocatorias de esta magnífica formación musical que interpreta jazz, swing y grandes temas que forman parte sin duda de la memoria colectiva de muchísimas personas, especialmente de quienes ya peinan canas pero que igualmente trascienden por su calidad y gustan igualmente a los mas jovenes, pero si se lograra proyectarla fuera de nuestos límites locales sin duda se constituiría en una valiosa aportación a la imaginaria, pero necesaria, marca "Jerez" de la que cabe esperar tanto si efectivamente se concretara en algo positivo...
Y con esa música de fondo, que mejor manera de poner fin a la pausa abierta en este Blog, durante el caluroso agosto que anoche mismo dejamos atrás y con el que ya emprendemos la septima temporada consecutiva.
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