Según hemos podido constatar no ha sido problema exclusivo de Jerez y para los jerezanos, pero como lo que nos importa primordialmente es nuestra ciudad, debemos denunciar la anarquía que en estas fiestas navideñas que casi concluyen y especialmente en la noche de fin de año hemos padecido, cohete va, petardo viene, quebrando el sueño de quienes se fueron a la cama a una hora prudente, provocando sustos con el estruendo de las explosiones y evidenciando, sobre todo, que parecemos muchas veces una ciudad sin Ley...
Por eso cabe preguntarse si aquí no vigila nadie los comportamientos anti sociales, aquellas conductas que alteran la pacífica convivencia y que suponen una clara trasgresión de las leyes, pues sabido es que la venta de cohetería está especialmente prohíbida y perseguida pero al parecer Jerez, en esto, es una excepción a la norma.
Sabido es la falta de medios con que cuenta la Policía para cumplir con su función. Larga enumeración de carencias y limitaciones que le impiden, muchas veces atender al papel que la sociedad les tiene asignado, pero de eso a esto que nos ocupa - los contínuos petardazos navideños - media un abismo que alguien debería tratar de corrregir y cuanto antes mejor ya que de lo contrario cabría preguntarse para que sirven estos cuerpos encargados de la seguridad ciudadana a los que se destinan no pocos recursos del erario público...
Y como es asunto recurrente, al que no se acaba de poner remedio, dejemos aquí nuestra denuncia y nuestra protesta.
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