Eso dicen los Medios y anuncian los partidos políticos e incluso evidencian las vallas que han aparecido estos días en diversos lugares de la ciudad, para que en ellas se pegue la cartelería propagandística de las formaciones que concurren a los comicios, pero por lo visto y oído, desde hace ya muchos meses, uno tiene serias dudas sobre si la Campaña de verdad se inicia al filo de la medianoche o ya estábamos en ella.
Por otra parte uno duda seriamente, por mucho que se esfuercen los seguidores de cada partido, si la Campaña sirve verdaderamente para algo o por el contrario es una pérdida de tiempo además de suponer un cuantioso gasto evitable, máxime en los tiempos de crísis que vivimos, pero en todo caso así están planteados el calendario y la estrategia electorales por lo que dificilmente, mientras no se aborde en profundidad una necesaria reforma de las leyes por las que se rigen los comicios seguiremos asistiendo a este ceremonial partidario...
Claro que si las Campañas sirvieran para que, de verdad, el electorado pudiera conocer lo que los Partidos pretenden hacer si llegan a gobernar y sobre todo para que estos en lugar de dedicar toda su atención a los adversarios para descalificarlos utilizaran sus actos, su presencia en los Medios, su elementos propagandísticos para explicitar las claves de sus respectivos programas y especialmente sus medidas en todas aquellas cuestiones que de verdad preocupan a los ciudadanos, posiblemente merecerían el interés y la atención de todos nosotros.
Pero hasta ahora, por lo visto en ocasiones anteriores, un mal menor que debemos soportar pacientemente durante quince días...
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